Siguiendo el eco erróneo del patriarcado

miércoles, 2 de agosto de 2017

Siguiendo el eco erróneo del patriarcado




Llegando a la pulpería, me encuentro a unos alerxs
quienes a su vez me preguntan? Sí ya conozco a la nueva vecina, 
que esta ¡huy! súper buena.    

Y les contesto; a ver no puedo apoyar tus ideas patriarcales;  
no sos vos el compa que tiene novia y a la que queres;
el compa que tiene sobrinas, hermanas y mamá;   
es más como podemos entender que esas situaciones son acoso hacia las mujeres.
     
Les comente, si me permiten, sigo diciendo, esos detalles hacen que me quite escudos sobre el machismo que me han heredado, ustedes tienen la forma consciente, en no seguir replicando dichas acciones o conductas.

Una mujer puede encenderse de mil colores; desnuda en sus fragancias,
partida y difundida en mil millones de fragmentos, taciturna, sedicioso, libradora de su control emocional y receptora de simulacros, pajizos del macho pajero, inmaduro por los miedo de sus propias inseguridades; expertos en crear vagas ilusiones.  

Una mujer no es adyacente o inaccesible;
una mujer es autora de sus criterios; una comandante en el control de generar vida.

Una mujer no es el ensimismamiento para endiosarlas; pero sí que tengamos la capacidad de escucha; y no retraer o fingir que las entiendes; como cuando cuelgas tus decisiones, cual fueran ejemplificadas a través de una transacción en una casa de empeño; entendiendo que se gana intereses por cuando  mayor sean tus aportaciones sobre tus chantajes emocionales.

Nuestras conductas hacia las mujeres; no debe de ser la misma,
obedeciendo al sacar o remplazar otro ser humano.

Mejor démonos cuenta, que la alegría está en la compresión misma en aprender a fluir como agua con buenas vibras.

Aprendamos que una mujer debe de ser hálito característico, voluble, vehemente, agua inagotable, lejana y cercana, fugitiva, multifacética.

Una mujer es diosa del crepúsculo, solitaria merodeadora y heredera del patriarcado, por tal razón no la llames la viuda negra, trepadora de la vida, recipiente sin fondo, carente de amor y sobre carga del deseo.

De seguir así, seguiremos siendo nosotrxs lxs que seguiremos replicando y abalando más pendejadas machistas y patriarcales entre conductas de opresión y oprimidas a través de la herencia cultural, ideológica, política, social, económica en nuestras convivencias.


JJ Barrera (02-08-2017).

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